Reflexión XXV - Suicidio

Saltar parecía tan fácil.
Lanzarte al vacío,
dejarte caer,
destrozar tu cuerpo.
Esparcir tus pecados,
tus miedos,
tus arrepentimientos,
tus tristezas,
mancharlo todo.
Despojarse del pasado.
Avanzar hacia un futuro.
Incierto
pero apacible.
Saltar parecía tan fácil.
Tres segundos
para la libertad.
Dejando
una mancha de egoísmo,
un charco de llanto,
misería,
mucha misería.
Aun así
merecía la pena.
Asomarte,
cerrar los ojos
y reventarte.
Saltar parecía tan fácil
pero tenía miedo a las alturas.

Reflexión XXIV - The End

con Radiohead de fondo
te despedías de mí
como en una película
con un final abierto
un futuro incierto
una trama inacabada
en definitiva
una mierda
te marchabas
dejando a tu paso
escenas inolvidables
planos majestuosos
homenajes a los grandes directores
conviritendote en un clásico atemporal
Kubrick
envidiaba tu simetría
Hitchcock
se mantenía en suspense
Tarkovski
admiraba tu poseía
todos los críticos te alababan
excepto yo
que te veía marchar
llena de vida
jovial
feliz
mientras dejabas
un lecho de destrución
de sentimientos encontrados
de heridas sin cicatrizar
de frases inacabadas
en definitiva
otro puto final abierto